Johana Gutiérrez. Diplomada en Nutrición Humana y Dietética.
Particularmente esta receta me encanta, porque me la enseño una de mis mejores amigas. Ella, durante varios años tuvo un sitio donde servían brunch en La Haya (Holanda) y este era uno de sus bizcochos estrella.
La particularidad de este bizcocho, es que es de textura muy fina gracias a la harina de almendras, haciéndolo apto para celiacos (recuerda usar harina de almendras certificada).
INGREDIENTES:
- 1 naranja hervida (1 hora).
- 1 limón.
- 170 gramos de harina de almendras o almendras crudas para triturar en caso de no disponer de harina de almendras.
- 2 huevos.
- Azúcar o dátiles 80 gr (según lo san@s que quieras ser).
- 1 cucharadita de levadura química.
- Tableta de chocolate negro 85% sin gluten.
- 1 cucharadita de aceite de coco o un poco de mantequilla (lo que tengas).
- un puñado de semillas: yo usé un mix de semillas de lino y amapola (opcional).
ELABORACIÓN:
- Lo primero que debes hacer es hervir una naranja durante una hora, SÍ, ¡1 HORA! El objetivo de esto es que quede lo suficientemente tierna porque vamos a batirla con piel incluida. Recuerda lavar bien la fruta previamente.
- Poner en remojo los dátiles, en caso de utilizar esta opción como endulzante, en caso contrario, puedes saltarte este paso.
- Precalentar el horno a 180 C
- Una vez lista la naranja, abrirla y retirar los dos extremos y las semillas, batirla con una batidora eléctrica de mano o de vaso y añadir los dátiles previamente remojados o el azúcar.
- Ten a mano el resto de ingredientes porque vamos a proceder a mezclar todo. Recuerda que si vas a usar harina de almendras, debe estar certificada, sino también puedes usar almendras crudas y peladas, y batir con una batidora de vaso o un triturador de alimentos, a máxima potencia, hasta conseguir la textura de harina.
- En un bol más grande incorporar la mezcla de la naranja y los dátiles (o el azúcar) y añadir la harina de almendras, la ralladura de un limón, los huevos, la levadura y las semillas (opcional).
- Mezclar todo con una cucharada o una paleta mezcladora, con movimientos envolventes.
- Engrasar un molde de máx. 22cm de diámetro, añadir la mezcla y esparcirla bien.
- Hornear durante 25 minutos.
- Sacar el bizcocho del horno y dejar reposar.
- Desmoldar y una vez frío, añadir una mezcla de chocolate negro (40 gr) con un poco de aceite de coco o mantequilla (1 cucharadita).
- Conservar en un lugar fresco o en el frigo.
Esto es todo, espero que te sorprenda tanto este bizcocho como a mí, es una delicia y suele gustar a todo el mundo. Es ideal para acompañar con un té o infusión, en esta época donde parece que el fresquito se va acercando tímidamente.
Información importante: presta atención a cómo batir los ingredientes, para conseguir la textura ideal.
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