Johana Gutiérrez. Diplomada en Nutrición Humana y Dietética
Si nos trasladamos a hace 10 años, una persona celíaca tenía muy complicado encontrar alternativas sin gluten, tanto en comercios, supermercados o en establecimientos de hostelería y restauración. Hoy en día, todo esto pertenece al pasado y lo que era una necesidad para un colectivo, ha terminado en convertirse en una moda.
Los motivos del aumento del consumo de productos sin gluten son variados, se destaca un mejor diagnóstico de la enfermedad celíaca, un aumento de las intolerancias y la creencia, de que el gluten no es saludable, por lo que el mercado se ha rendido a los productos “gluten free” porque hay un nicho de mercado creciente.
Deben prescindir del gluten en su dieta para estar sanos, las personas con celíacas y las personas que padecen sensibilidad al gluten no celíaca (SGNC), debido a que el gluten en su caso SÍ es nocivo y su cuerpo no lo tolera, sin embargo, hay una tendencia de falsas crecencias que consideran al gluten dañino para la salud o lo vinculan al aumento de peso, por lo que se han incrementado las “dietas sin gluten” por moda.
Aún así, ¡vamos a verle el lado positivo! Debido a que la industria alimentaria en los últimos años ha registrado un amplio crecimiento de la venta de productos sin gluten y ha invertido mucho tiempo y dinero en desarrollo I+D+I para sacar al mercado productos innovadores con una muy buena calidad organoléptica y debido al aumento de la demanda han podido ofrecer estos nuevos alimentos a precios competitivos. han sido necesarias numerosas investigaciones por parte de universidades, centros de I+D y empresas.
Un claro ejemplo de la mejora en los precios y la calidad se refleja en los productos elaborados a base de masas fermentadas, que son difíciles de imitar al eliminar el gluten. Así ha quedado reflejado en el Biet Meeting (evento de referencia del secor del plan e industrias relacionadas), organizado por el Grupo Profesional Alimentario de la AIQS Alumni y celebrado en las instalaciones de IQS en Barcelona.
Los productos sin gluten protagonizaron el segundo día de estas jornadas de la mano del Dr. Waqas Qazi (product technologist en Zeelandiadel), Manuel Gómez (Catedrático en tecnología de los alimentos de la Universidad de Valladolid), Daniel Gómez-Bravo (CEO de Bread Free) y Stefan Jansen (director comercial de Brabender)
Las intervenciones de estos cuatro ponentes contribuyeron a dibujar el mapa de la situación actual del en este sector y la evolución alcanzada gracias a la innovación y la tecnología, además de visualizar retos futuros y prometedores como el trigo sin gluten desarrollado por Bread Free o la mejora de la calidad nutricional de los productos sin gluten, debido a que actualmente son menos nutritivos, lo que obliga a la industria a buscar fórmulas para que el colectivo de consumidores pueda llevar una dieta más equilibrada.
El objetivo es claro, conseguir que todo el mundo pueda consumir productos sin gluten elaborados de manera natural, sin aditivos, que mantengan sus características organolépticas y nutricionalmente adecuados que es lo que la sociedad está reclamando, además de que sean productos accesibles sin necesidad de distinguir entre con o sin gluten.
La industria de productos alimentarios sin gluten está avanzando a pasos agigantados y es un gusto poder ver los avances constantes que aseguran una alimentación más inclusiva.